
Abro mi mano y te dejo volar.
Deseo que encuentres la felicidad.
Despacito, luchando con mi deseo de retenerte, abro mi mano.
Y miro como tu indecisión hace más dificil la mía.
Vuela, vuela alto.
No mires atrás.
Te dejo la última decisión, pero mi mano está abierta
Y mis alas desplegadas para retomar a mi estado anterior.
