jueves, 3 de mayo de 2007

Una más en la familia


Pues sí, éste ha sido un acueducto que ha dado lugar a muchas cosas, desde descubrir nuevos lugares (nuevos para mi, por supuesto), romper con la monotonía del día a día currantil...

Y ya que hablo de descubrir nuevos lugares, ¡manda carajo que tengan que venir de fuera para enseñarme mi tierra!, jejejejejeje, pero así soy yo.

Ahora no podría hacer un listado de todos los sitios que me presentaron, porque tengo un batiburrillo mental que ya ya, pero creo que Madrid es menos complicada de lo que me imaginé. Vale, que soy más de campo que las amapolas, pero es que Madrid marea, y es una delicia cuando se queda casi vacía y relajado.

Pero algo que cambió mi vida familiar, y fue la llegada de esa pequeña, que a pesar de pequeña tiene unas curvas de impresión. Toda ella morena.

que me deja acariciarla y me deleita con grititos, jajajaja.

Nada, no penséis mal, que no me ha dado por la indecencia, pero es que la cigüeña... ¿o fue una gaviota?, me trajo una nueva componente de mi familia musical.

Si, dentro de menos, tengo una pequeña orquesta, con la que maltrato a mis pobres y abnegados vecinos que no se quejan, y aún no entiendo por qué, porque cuando no suena una trompeta, es un saxo, o unos bongós, o una guitarra y ahora... una violina.

Y como soy autodidacta en casi todo... me llevará tiempo dar un concierto... bueno, no volemos muy alto que luego nos esmoñamos.




1 comentario:

Anónimo dijo...

Qué suerte tener gaviotas que te hagan regalos como "violina". Tienes razón, menudas curvas, quién las catara,je,je,je.
Envidio dos cosas de tu escrito, la primera es el regalo de una gaviota, y la nena navega y nunca me han regalado nada más que su compañía y sus cantos, y la otra, que hayas tenido la suerte de conocer ese Madrid,al cual amo tanto, de la mano de un ser foráneo...eres tremendamente afortunada.
Cuando puedas, preséntame a la gaviota y como no, al foráneo o foránea...