Y no, no me voy a quejar de que se tomen medidas para eliminar de nuestras calles determinadas actitudes, digamos “antisociales”. No me voy a quejar, pero… igual se pueden encontrar “pequeños y oloroso” matices.
En Madrid se va a multar con hasta 1500 euros (¡casi dos meses de sueldo!) por no recoger la caca del perro a ¿los dueños? ¿los que pasean al animalito? Porque claro, en ese caso ¡cómo me voy a fiar de dejar que mi sobrin@ pasee al perrito si no me asegura que recogerá su caquita! (igual le pido que me la traiga a casa para asegurarme que la recogió y por si acaso le pongo un fianza hasta que me sea dada la “joya”)
¿Será igual la sanción dependiendo del “tamaño” del “marrón”? ¿de su textura?....
¿dependerá del poder adquisitivo de su dueñ@?
¿se premiará con bonificaciones a los dueños que siempre las recogemos?.
¿se ampliarán estas medidas a “otros animalitos que defecan en las calles”? (que yo he visto mamás que bajan los pantaloncitos y dejan el premio de su nen@ ahí, cerquita del resto de sus amiguit@s, y nadie le dice nada).
¿es en realidad una forma de “educación para la ciudadanía” o simplemente otra forma de seguir financiando las faraónicas obras madrileñas?
¿y si en lugar de un perro, tengo gato o hurón o cerdo vietnamita? ¿también valen los mismo sus caquitas?
